En adición a la contribución importante que hace la castidad al establecimiento de una vida conyugal feliz, la automobile-disciplina exigida por su práctica, contribuye al fortalecimiento de la voluntad y en consecuencia al desarrollo de otras cualidades espirituales.
Aclara explícitamente, lo que significa la castidad para el matrimonio, exhortando al Handle de los apetitos sexuales y la preservación de su íntima y espiritual expresión solamente para la pareja casada.
“Haced de vuestro hogar un amparo de descanso y paz. Sed hospitalarios y dejad que las puertas de vuestro hogar sean abiertas ante los rostros de amigos y additionalños. Dad la bienvenida a cada visitante con gracia radiante y dejad que cada uno se sienta como en su propio hogar.
“En cuanto a tu respetable marido: te incumbe tratarle con suma bondad, considerar sus deseos y ser conciliativa con él en todo momento, hasta que él se dé cuenta que, por haberte dirigido hacia el Reino de Dios, tu ternura para con él y tu amor para con Dios sólo han aumentado, así como tu interés para sus deseos bajo todas las CircuflstanCia8.” ninety two
“El concepto bahá’í del sexo está basado en la creencia que la castidad debe ser estrictamente practicada por ambos sexos, no sólo porque es en sí altamente recomendable éticamente, sino también por ser el único comino a una vida marital feliz y venturosa. Las relaciones sexuales de cualquier tipo fuera del matrimonio no son permisibles.” 27
Por eso, también es recomendable guardarse de la inclinación de contar sus problemas conyugales a personas comprensivas del otro sexo. Todo matrimonio tiene algunos problemas debido a las imperfecciones de cada cónyuge.
Idealmente la relación que sigue será caracterizada por libertad, comprensión y sinceridad. Ninguno de los dos sentirá que la amistad del otro y le pertenece exclusivamente, ni que tiene que evitar la amistad de otros amigos del sexo opuesto.
“La felicidad espiritual es eterna e insondable. Esta clase de felicidad aparece en el alma de uno con el amor a Dios y permite adquirir las virtudes y perfecciones del mundo de la humanidad.” 19
“Ama a tu esposo y siempre sé amable con él, no importa cuán grande sea su mal humor. Aún si tu cariñosa bondad le hace más amargo, manifiéstale más cariño, más ternura, sé más amorosa y tolere su mal trato y acciones crueles.” 83
A veces dos Bahá’ís se casan, cada cual con la esperanza de que el otro le ayudará a ser más regular en sus hábitos de oración, meditación y servicio, y que le estimulará a un mayor desarrollo de cualidades espirituales.
“El mero conocimiento de principios no es suficiente. Todos sabemos que la justicia es buena, pero hay necesidad de volición y acción para llevarla a cabo y manifestarla.” 111
Por eso, cualquier persona, Bahá’í o no, que conscientemente aplique las enseñanzas de Bahá’u’lláh a su matrimonio y en su vida, descubrirá que en verdad son un camino seguro para lograr una felicidad más profunda y duradera.
“El hijo... debería mostrar matrimonio bahai suma obediencia para con su padre y debería conducirse como un siervo humilde y sumiso, De día y de noche deberla esforzarse con diligencia para asegurar el confort y bienestar de su padre amoroso y conseguir su beneplácito.
Al encontrar un problema, la persona espiritualmente inmadura trata de escapar de él. En vez de enfrentarse al problema, espera que otro lo resuelva. Si ha cometido un mistake, busca culpar a otra persona.